miércoles, 13 de octubre de 2010

El entrenamiento

Una de dos: o cuando no mando los correos no se pasa por aquí ni el Tato, o no teníais ningún comentario que hacer a mi actualización del lunes. Ambas respuestas son posibles. Y respetables.

Así que para el que se haya perdido, estoy trabajando de comercial. De hecho estoy escribiendo esto ahora mismo “disfrazado” de comercial. Y digo “disfrazado” porque no me siento identificado con pantalón fino con raya y camisa. Me siento mucho más identificado con mis camisetas de dibujitos y colorines, vaqueros cagadillos y zapatillas de punteras blancas, que es como actúo cuando hago monólogos y como visto cuando estoy en un día de diario normal.


En fin. Que estoy trabajando de comercial y me han dicho ya varias veces que “valgo” para esto. De hecho, hoy le he intentado vender la tarjeta a un hombre que vendía tarjetas de otro tipo (tarjetas de descuento en ocio) y me ha dicho que no estaba interesado pero que me veía buen comercial. Y me ha dado su teléfono. Me ha dicho que si me falta el trabajo donde estoy ahora, que le llame.


Parecerá una tontería, pero yo estoy viendo esto como un entrenamiento a la hora de enfrentarme ante un productor. Porque los guionistas, también tenemos que ser comerciales de nuestras propias ideas, a la hora de vender una historia para que se produzca. Lo que se llama el pitching. Y yo, en eso ahora, estoy haciendo un Master cobrando. Cobrando poco, pero cobrando. A lo mejor es una manera un poco hipócrita de ver “mi nueva profesión”. Pero bueno, es que prefiero pensar que esto es sólo una época de tránsito hacia otra etapa. No sé si mejor o peor, pero hacia otra.


El caso es que también me sirve este trabajo como estimulante para escribir. Y me explico. Ahora mismo, para ganarme las habichuelas, tengo que aguantar unas condiciones bastante precarias, tengo que aguantar jefes que me exigen objetivos, tengo que aguantar clientes que me contestan mal y me ponen malas caras. Y todo eso, me hace pensar que cuando llego a casa, tengo que escribir para salir de esto. Quizá para aguantar también condiciones precarias, jefes que me exijan plazos de escrituras y reescrituras, opiniones de todo tipo (constructivas y destructivas) hacia mis historias. Pero creo que ya he dicho que todo esto es como un entrenamiento, ¿no? Pues eso.


Estoy haciendo malabares con mi agenda. El otro día lo publiqué en Twiter. Porque ahora compagino el curro con ensayos de teatro de tres obras distintas, actuaciones, prácticas de moto y entrenamientos de rugby. Con deciros que estuve varios días con un dolor de muelas insoportable y fui la semana pasada al dentista, me miró y me dijo que sacara cita para esta semana. Pues bien, el dolor de muelas se ha esfumado. Yo creo que porque ha sospechado que ya no cabe dentro de mis planes. Va a ser más psicología que odontología. Pero de momento, no voy al dentista. No tengo tiempo.


Y en cuanto a las actuaciones, mañana por la noche estoy en La Farándula, en Algeciras. Y pasado estoy en un local del Rincón de la Victoria, el Swan Playa. Estoy teniendo una o dos actuaciones por semana. Y estoy orgulloso y feliz por eso.


En lo que se refiere a guión, sigo escribiendo "mierdas cortas". Pero también me estoy peleando dentro de mi cabeza con dos sinopsis. Son dos sinopsis que no termino de escupir. Para cada una de las historias tengo varias ideas, imágenes, situaciones… muchas cosas que tengo que conectar para que terminen siendo historias redondas de las que pueda empezar a desarrollar un guión. Pero bueno, poco a poco.


Más estresado que Will Smith en "En busca de la Felicidad".


Nos leemos el domingo porque no pienso actualizar antes. Total, no os vais a pasar por aquí hasta entonces… Es broma, tontorrones. Os llevo siempre dentro de mi cabeza. Ya lo sabéis.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que tu pot del domingo debería de tratar... no sé... de ¿OCASIÓN? que fé tengo....

SKY LINE OR DIE!

IIPP dijo...

Vargas, tú sabes que yo siempre te leo, miercoles y domingo estoy subscrito a tu blog.
Me alegro mucho de que hayas conseguido tu curro de comercial y sé que tu lengua vale mucho!!!!! ajjajajjaja!!!

Anónimo dijo...

Lo que pasa es que los comerciales y los monologuistas/actores comparten ciertas aptitudes. Y tú, un chico responsable (y con este traje, bien acicalado), quieres hacer bien tu trabajo. Blanco y en botella.
V

Anónimo dijo...

Ey, Juanje, q sí, q te leo hasta yo, y eso q no me gusta internet!!!Me alegro de q estés trabajando, aunq sea de comercial! De todos los trabajos se aprende algo. Y te comprendo en eso de q vas disfrazao... precisamente tú me viste a mí en el aeropuerto X) Estás haciendo un gran esfuerzo con todo,alguna recompensa caerá. un bso!
(Rocío S.Uni)

Cristina dijo...

Ay Juanjete, si al final vas a valer pa' to'. ¡Muchos ánimos!