Estoy muy ilusionado por llevar a mi pueblo a dos grandes cómicos, grandes amigos y mejores personas, como son Lolo Albarra y Blete, para la actuación que tendrá lugar este viernes, a partir de las nueve y media de la noche en la Casa de la Cultura de Pizarra. Cuando hablo con todo el mundo de esta actuación, a todos les digo lo mismo sobre estos dos individuos: los he avisado para actuar en Pizarra porque son cómicos que a mí me hacen mucha gracia. Es decir, no hubiera avisado a nadie con quién no me hubiese reído yo en sus actuaciones, porque quiero darle a mi gente lo mejor de lo que yo conozco. Pero es que además, con estos dos grandes personajes yo puedo decir que he crecido en esto de los monólogos. No porque ahora sea muy grande en este mundo, sino porque desde que empecé, he estado actuando con ellos en concursos y bolillos que nos han salido juntos. Desde el año 2006 les estoy viendo las caras cada poco tiempo, siempre por temas de comedia, lógicamente. Y ya nos apetecía hacer algo todos juntos porque sí. Así que lo dicho, muy ilusionado quedo con las expectativas de esta actuación. Espero que la gente de mi pueblo sepa apreciar esta delicatessen de buen humor que les ofrezco.
Además, como supongo que luego nos iremos de cenita a algún sitio, pues mejor que mejor. Esto es algo que todavía no he hablado con ellos, pero creo que huelga decirlo. Chicos, tenéis muy mala follá si no os quedáis después. ¿Ves? Es venir Blete y ya estoy adaptando expresiones al granadino.
Y lo siguiente de lo que quiero hablaros, es sobre una llegada inesperada. La vida de la gente cambia, y la mía últimamente está cambiando poco a poco para mejor. Yo lo estoy notando. Desde hace algunas semanas me siento más tranquilo, me siento a gusto con lo que hago, es como si todos los malos rollos que me rodean, se estuvieran esfumando. No es que mi vida haya dado un giro de 180 grados ni mucho menos, pero sí que os puedo decir que está virando hacia algún lugar mejor. Y ahora si era el momento idóneo para añadir un nuevo elemento a mi pequeña familia. Esa que estoy montando ya fuera de la casa de mis padres, junto a Laura. Así que os presento a Dora:
Dora es la de negro. El de naranja soy yo. La foto, horrible. Como todas las que hace mi móvil.
Y por hoy, nada más. El domingo espero poder hablaros de más cosas, hacer balance y repasar alguna asignatura pendiente. Que con esto de ir fallando en las publicaciones semanales, todavía debo alguna entrada… ¿Verdad Manu? Pues eso.